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El poker es un apasionante juego de cartas que en los últimos tiempos está causando furor, así que no es de extrañar que tantas y tantas personas se acerquen a él. Si tú también lo has intentado o pretendes hacerlo, hoy analizamos algunas particularidades para disfrutarlo desde el inicio.
Es el pasado aquellos que se interesaban por el póker tenían muy pocas opciones, pero ahora el panorama es totalmente distinto. Hoy en día la cantidad de información a nuestra disposición es enorme, y justamente por eso, para que no te pierdas en los comienzos o para mejorar tu juego hemos creado esta sencilla guía práctica.
Fundamentos para principiantes
Todo gran jugador de poker tuvo que pasar por una fase inicial de comprensión del juego. De hecho, la mayoría de ellos coinciden en que cuando empezaron su gran problema fue la falta de explicaciones, a excepción de unos pocos libros publicados sobre la materia.
Otra alternativa era aprender jugando. Pero de esta manera el coste económico podía llegar a ser muy alto, ya que antes de la llegada del póker en línea no todos podían permitirse acudir a los casinos para enfrentarse a experimentados jugadores.
Afortunadamente, como indicábamos antes, en la actualidad existen infinidad de vías a nuestro alcance para entender el juego de cartas más popular del mundo. Eso sí, que no te abrume tal vorágine de oferta informativa. Para interiorizar bien la dinámica debes:
1. Buscar una buena guía estratégica de póquer online
2. Consultar libros o artículos específicos para principiantes
3. Visionar vídeos
En este sentido te recomendamos visitar casinosenvivo.es. Donde encontrarás buenos consejos sobre las diferentes variantes del póker, así como una comparativa de los mejores sitios web para practicar y ganar.
Pensar como buen jugador de póquer
Nos encontramos ante un juego que es mucho más que azar; es estrategia, probabilidades, matemática, memoria, paciencia… Todos ellos condimentos únicos que aportan su toque especial al conjunto, haciendo de este un entretenimiento tan querido. Y aún más fascinante que todo eso es la relación entre los oponentes.
¡Aquí hay mucho de psicología! En una partida intervienen emociones y reacciones que hacen que cada cual actúe de una manera particular, por ello uno de los principios básicos es entender la mentalidad tus adversarios. Algunos participantes son más impredecibles, otros más impulsivos, los hay más calmados… pero en la medida de lo posible debemos predecir su comportamiento, entendiendo cómo piensan.
Entonces partiendo de la base de que el póquer es un juego mixto de destreza y suerte, entendemos que tanto las probabilidades como la información ‘externa’ que disponemos pueden hacernos ganar. Pero expliquémoslo un poco mejor para entenderlo… Pues bien, las cartas son aleatorias en cada reparto, ¿verdad? Asimismo, el ganador de una mano estará determinado aleatoriamente. En términos de probabilidad, un jugador -por muy habilidoso que sea- no puede aumentar sus posibilidades de ganar una jugada en la que no obtuvo las mejores cartas; pero SÍ puede lograr que sus adversarios se retiren, y ahí es cuando entra en juego la habilidad.
Cabe mencionar que el objetivo último no es ganar el mayor número de manos, sino:
· Sumar la mayor cantidad de puntos posibles, si se juega póker gratis.
· Sumar la mayor cantidad de dinero posible, si se juega con dinero.
Teniendo esto en cuenta, un buen apostador tratará de perder poco con sus manos malas y de ganar mucho con las buenas. Lógico.
Continuando con la idea de la combinación entre azar y habilidad, es conveniente saber que a corto plazo prevalecerá la suerte; por el contrario, a largo plazo siempre predominará la destreza. De forma que, jugando más manos en periodos de tiempo prolongados, lograremos que el factor suerte no influya en la partida.
Alguien que quiera ser ganador de forma constante considerará los resultados a largo plazo, olvidándose del corto plazo. Atendiendo a esto, no deberá importarle tanto el resultado de una sesión -y todavía menos de una jugada.
Resultados a largo plazo
Darles gran importancia a los resultados obtenidos a corto plazo es peligroso, pues sólo conseguiremos sentirnos pletóricos ante un buen día y desencantados tras una mala jornada, tendiendo a cometer ciertos errores:
· Ir perdiendo y seguir jugando para tratar de recuperar las pérdidas, en vez de retirarse. Este comportamiento es un gran error y puede ocasionar la pérdida total del bankroll. Acepta que tienes un mal día, y que a veces es normal perder.
· Sobreproteger los beneficios. Lo contrario que antes. Si tienes un buen día y obtienes muchas ganancias, no mudes hacia una actitud muy conservadora descartando jugadas positivas para no arriesgar lo ganado. Más que cuidar las ganancias estarás jugando mal.
· Frustrarse (entrar en tilt) fácilmente. Esto es un estado de confusión mental provocado por no soportar una derrota.
Igualmente, insistimos en la cuestión de que en cada mano habrá que intentar tomar la decisión correcta, aunque el resultado real de esta será irrelevante. Habrá muchas ocasiones en las que haciendo la mejor jugada perderemos puntos/dinero. Esa es, precisamente, la razón por la que debemos preocuparnos en resolver cada mano siempre de la mejor manera posible, pero sin obsesionarnos por ganar en cada una de ellas.
Recapitulando…
Después de esta pequeña toma de contacto con el apasionante mundo del poker, esperamos haberte ayudado a entender mejor las nociones básicas. Una vez que te animes a adentrarte de lleno, recuerda concentrarte tanto cuando ganas como cuando estás perdiendo; sólo así podrás lograr el verdadero propósito de decidir correctamente para ganar.
Y a partir de aquí, sigue aprendiendo y analizando el juego, mejorando tus habilidades para llegar a ser profesional. ¿Por qué no?
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